5% DTO EN TUS COMPRAS SUPERIORES A 35€. HAZTE CHEF CULINARIUM Y APROVÉCHALO

Si tienes una parrilla, tienes una excusa para comer rico y sano


Hay dos tipos de personas en esta vida: las que ven una parrilla y piensan en costillares grasientos y hamburguesas XXL y las que saben que una parrilla bien usada es una puerta secreta a comer sano, rico y como un auténtico chef de revista. Si eres de los segundos, te traemos la guía perfecta para marcarte planazos llenos de comida saludable, sabor y cero dramas. ¿Te apuntas? 

Que no te engañen; parrilla no es igual a atracón


Vamos a dejarlo clarísimo desde el principio: cocinar en parrilla no es sinónimo de asarte media vaca en una tarde. Hoy en día, la parrilla es el mejor aliado de quienes quieren comer ligero, sabroso y con cero remordimientos. 

Puedes hacer desde verduras marinadas que crujen que da gusto, hasta pescados, brochetas de tofu o incluso frutas grilladas que te harán replantearte todo lo que sabías sobre postres. 

La clave está en cambiar el chip: la parrilla no es un campo de batalla carnívoro; es un escenario donde cualquier ingrediente puede brillar. Piensa en texturas, aromas que flotan en el aire y en ese dorado perfecto que solo un buen grillado te puede ofrecer. 

¿Y sabes qué es lo mejor? Que todo es rápido, fácil y sin mancharlo todo. Abres tu cerveza (o tu kombucha, que aquí estamos en modo healthy), planta tus verduras o tu pescado sobre la parrilla, un par de vueltas… y literalmente en menos de diez minutos tienes un plato que parece sacado de un restaurante top, pero hecho en tu terraza o jardín. 

Parrilla barbacoa, parrilla eléctrica o grill, ¿cuál es tu rollo? 


Vale, ya tienes claro que la parrilla es tu nueva aliada para comer sano y rico, pero ahora viene la gran pregunta: ¿con qué arma te vas a lanzar a la conquista del sabor? 

Porque ya sabemos que no es lo mismo tener un terrenazo que vivir en un maniático con terraza coqueta, así que antes de empezar a grillarlo todo como si no hubiera un mañana, toca elegir bien. No te preocupes, aquí te explicamos cada opción para que aciertes sin sudar la gota gorda. 

Parrilla barbacoa

La clásica de las clásicas. La que huele a domingo de verano y a risas de fondo. Si tienes un buen jardín, una terraza potente o simplemente mucho espacio libre, esta es tu mejor amiga. ¿Lo mejor? El sabor ahumadito que solo las brasas pueden dar. 

Prueba a potenciar tu experiencia con nuestros complementos cinco estrellas. Hazte con tu juego de 4 utensilios de barbacoa Koopman, tus pinzas de barbacoa 25 cm Iris y tu parrilla BBQ Koopman

Nada de prisas: aquí la cosa va de disfrutar el ritual, encender el carbón, controlar el fuego, invitar a toda la banda y coronarte como el rey o la reina del asado.

Parrilla eléctrica 

No todos vivimos en una casa de campo (ojalá), pero eso no significa que tengas que renunciar a la fiesta. Si eres de los que tienen balcón, terracita urbana o, simplemente, quieres algo práctico para el día a día, tu rollo es la parrilla eléctrica. Para eso tienes nuestra grill eléctrico New Alabama 2400W Haeger o, si prefieres algo más versátil, nuestra plancha eléctrica Teppan Yaki Livoo.

Además, muchas traen grill incorporado para esas marcas bonitas que parecen hechas por un chef de Instagram. Limpias fácil, cocinas rápido y encima no molestas al vecino con columnas de humo.

Grill portátil

¿Eres de los que se apuntan a un picnic improvisado en cuanto sale el sol? Entonces necesitas un grill portátil sí o sí. Te proponemos el grill rayado Roaster 24x24 cm de Culinarium para esas verduras, pescados o toques ahumados que quedan de 10 sin cargar peso extra. 

¿Prefieres algo más versátil? El grill liso Roaster 24x24 cm de Culinarium es tu mejor aliado para cualquier plan improvisado.

Pesa poco, se monta en un suspiro y puedes llevarlo donde quieras: al parque, a la playa, al camping... donde haya hambre, ahí puede haber magia a la parrilla. Perfecto para los más nómadas y para quienes saben que cualquier rincón puede convertirse en un pequeño festín saludable.

¿Y si quieres tirar la casa por la ventana? 


Si tienes espacio y ganas de montártelo a lo grande, atrévete con una cocina exterior con parrilla. Solo necesitas una buena barbacoa, una mesa resistente, luces cálidas, alguna neverita llena de bebidas frescas... ¡y ya tienes el chiringuito de tus sueños! No necesitas ser arquitecto para montarlo: bastan ganas de disfrutar y el combo perfecto de parrilla, amigos y comida rica.

Recetas ligeras y sabrosas para romperla en tu parrilla 


Ahora que ya tienes claro cuál es tu compañera de batallas, toca ponerse en modo chef creativo. Olvídate de las chuletas XXL y abre paso a una parrillada saludable que te haga quedar como una estrella sin necesidad de hachazos de calorías. 

¿Ideas para flipar (y fliparlos)?

  • Verduras marinadas: calabacín, berenjena, pimientos y espárragos a la parrilla. Un toque de aceite de oliva, limón y tus especias favoritas y ¡pum! Sabor de otro planeta. Consejo de amigo: usa pinzas para carne de parrilla para girar las verduras sin destrozarlas.
  • Pescados al grill: un lomito de salmón, unas sardinas, o un filete de dorada sobre la parrilla y en menos de 10 minutos tienes un platazo digno de selfie. ¿Tip extra? Unas hierbas frescas (romero, tomillo) sobre las brasas dan un aroma brutal.
  • Brochetas veggie: combina champiñones, tomates cherry, tofu marinado y cebolla morada en un palito y pásalo por la parrilla. Crujientes por fuera, jugosos por dentro. Éxito asegurado.
  • Frutas grilladas: piña, melocotón, plátano… Ponlas sobre el grill y sorprende con postres ligeros, dulces y naturales. Un toque de canela o un chorrito de miel y ya tienes el final perfecto.

Para triunfar en el arte de la parrilla sana no hace falta ser un experto; basta con dominar algunos básicos: 

  • Ni brasas infernales ni calor de caracol. La temperatura media es tu amiga. 
  • Mezcla yogur, especias, hierbas y un chorrito de limón para marinados espectaculares y sin grasas pesadas. 
  • Cada ingrediente tiene su momento ideal. No lo abandones en la parrilla o terminarás masticando zapatillas de goma. 

¿Lo ves? Comer a la parrilla puede ser sano, divertido y, lo mejor de todo, rapidísimo.

El truquito para que tu parrilla esté siempre lista y como los chorros del oro 


Después de un festín increíble, nadie quiere pasarse media tarde rascando rejillas. Así que apúntate este tip:  

Mientras la parrilla sigue caliente (pero no infernal), pasa un cepillo metálico y después un paño húmedo para arrastrar los restos. Pero si eres un pro, también puedes frotar medio limón sobre las rejillas calientes, que además de desengrasar, también deja un olorcito cítrico buenísimo. 

¿Listo para conquistar la parrilla? 


Ya lo tienes todo: la teoría, la inspiración y las herramientas. Ahora solo te queda ponerte el delantal, invitar a quien quieras y disfrutar al máximo. 

Recuerda que en Culinarium tienes todo lo que necesitas para que tu cocina exterior sea digna de envidia. Desde parrillas eléctricas hasta barbacoas portátiles, grills todoterrenos y accesorios que hacen que cocinar sea puro disfrute. ¿Se viene planazo de parrilla sana este finde?